Día 31, me he pasado, a ver si lo pago caro...

Esta mañana, tenía que montar una paradita en un mercadillo de intercambio. En casa antes de salir me he tomado un café solo, y entre una cosa y la otra, hasta las 12 no  me he tomado una barrita de caramelo. No he podido tomar demasiada agua porque al estar en la calle, tampoco tenía un baño ni cerca ni cómodo.

Para almorzar hemos ido a un restaurante de la cadena Fresco,  que la verdad son los mas cómodos con esta dieta. Me he preparado una ensalada  y de segundo un calabacín a la plancha. De sobre me he tomado un botellín esprés de capucino. Esta vez le he puesto un hielo dentro, el agua y lo he meneado bien, y oj, que rico!

Para merendar me he comido una barrita de chocolate con naranja y un café solo.

Y para cenar... hemos ido con unos amigos a un restaurante vegetariano. De primero pues la sempiterna ensalada. Este restaurante tenía bufet así que me facilita las cosas. Y de segundo, ai madre... Pues me he pedido un pastel de calabacín. He preguntado lo que llevaba y me han dicho, que a parte de calabacín, pues un poco de cebolla, zanahoria, crema de leche y huevos. Una bomba he pensado, pero me he dicho, total, la base es calabacín, y a parte me he dejado el sobre en casa y tenía hambre. Pues nada, he separado la zanahoria que estaba cortada a rodajas lo suficientemente grandes como para irlas apartando, me he cortado una porción y a la boca, y ohhh que e la cobertura hay nueces! jajaja pero ya estaba en la boca jiji. He mirado de apartar el restro de nueces y he procurado no comer zanahoria, pero algo se ha escapado, y de hecho otra nuez la comí a propósito. Estaba delicioso. Tengo que hacerlo un día.

Una vez en casa, me he tomado una bebida de chocolate y a dormir, con la esperanza de no haber roto la acetosis...